EL PEZ LEÓN: SU INVASIÓN
Y AMENAZA PARA LOS PECES NATIVOS
Por: Noemí Peña Alvarado
Bióloga III - Laboratorio de Investigaciones Pesqueras, DRNA
En los años 80, dos especies visualmente idénticas de pez león provenientes del Indo-Pacífico fueron introducidas a los Estados Unidos mediante el comercio de acuario. Al principio, se habló de varias teorías para explicar su presencia y establecimiento en el Atlántico Occidental, pero investigaciones genéticas han comprobado que el punto de origen de la invasión es el estado de Florida, donde se cree fueron liberados especímenes al mar. La extensión de la invasión va desde Carolina del Norte hasta Sur América (Venezuela), incluyendo el Golfo de México. Los peces león se han establecido en casi todo el Caribe en menos de tres años. Se pueden encontrar en todos los hábitats marinos y profundidades, desde la orilla hasta más de 1,000 pies.
El pez león presenta una coloración muy vistosa, un cuerpo marrón rojizo con finas líneas blancas. Las espinas dorsales (12-13) son largas, puntiagudas y están cubiertas por piel retráctil. En estas espinas dorsales se encuentra su toxina ubicada en dos surcos o ranuras. Posee además unas aletas pectorales extensas y muy vistosas. Son comestibles, su carne es muy sabrosa y, contrario a la creencia general, ésta no envenena.
El pez león puede vivir por más de 15 años, alcanzando un tamaño que puede exceder las 20 pulgadas (47cm). Alcanzan su madurez sexual en menos de un año. En la Región del Caribe una sola hembra puede desovar aproximadamente 30,000 huevos y la reproducción ocurre durante todo el año, aproximadamente cada cuatro días. Los huevos se mantienen unidos en una masa gelatinosa y son dispersados por las corrientes oceánicas superficiales. Sus larvas son pelágicas (de mar abierto) y están hasta 30 días suspendidas en el flujo del mar. Esto hace que su dispersión a través de las corrientes sea muy exitosa.
Puede alcanzar densidades de sobre los 200 adultos por acre. Son El pez león: su invasión y amenaza para los peces nativos carnívoros generalistas, consumen más de 56 especies de peces y varios invertebrados. Pueden consumir presas de hasta más de la mitad del tamaño de su cuerpo. Muchas de sus presas son de importancia comercial, recreativa y ecológica. Pueden consumir hasta 4.5 libras de presas por hectárea por día. En lugares altamente invadidos, han consumido hasta un 90% de los peces nativos. Los depredadores nativos evitan al pez león. Hasta el momento el único posible depredador es el ser humano. Es por esto que debemos aumentar los esfuerzos para removerlos y poder reducir significativamente sus densidades poblacionales.
La función de las espinas tóxicas es ahuyentar depredadores y pueden afectar a los seres humanos, pero no de forma fatal. La mayoría de las hincadas reportadas han sido accidentales, por el mal manejo del organismo. En Cuba, un 92% de las personas hincadas se quejaron de dolor intenso local y un 60% reportó inflamación. En caso de ser hincado por un pez león, limpie bien el área afectada removiendo cualquier espina o tejido. Coloque el área afectada en agua caliente (NO HIRVIENDO). Puede aplicar antisépticos y antibióticos en crema para evitar infecciones secundarias. De surgir algún tipo de ampolla, ésta se debe reventar para liberar la toxina que esté atrapada en ella. La mayoría de los casos presentan mejoría al seguir estos pasos básicos. De no mejorar al cabo de una hora o presentar otros síntomas sistémicos como cambios en presión sanguínea, dolor de cabeza etc., debe acudir al hospital más cercano.
El Reglamento de Pesca de Puerto Rico – 2010, Número 7949 (24 de noviembre de 2010), permite su exportación sin límite y su pesca en diferentes cuerpos de agua (manglares, lagunas, estuarios etc.). Se permite también la captura en Reservas Naturales, Reservas Marinas, áreas de Planificación Especial o áreas cerradas mediante una autorización escrita del Secretario o Secretaria del DRNA (Autorización Especial para Voluntarios de Captura de Pez León). Para capturarlos, se puede utilizar arpón, figa, “hawaiiansling” y redes de mano para peces ornamentales en combinación con el equipo SCUBA. Se enfatiza que este permiso aplica sólo al pez león y la actividad debe ser notificada al Departamento de Recursos Naturales y Ambientales (DRNA) ya que debe ser supervisada por su personal.
De requerir información adicional pueden llamar a las Oficinas de Recursos Marinos, DRNA, al 787-999-2200, extensiones 2694, 2710. También, al Laboratorio de Investigaciones Pesqueras, DRNA, al 787-833-2025 ó 787-230-4950.